Descripción
Anhelo los días previos a la Última Desolación.
Los días en que los Heraldos nos abandonaron y los Caballeros Radiantes se giraron en nuestra contra. Un tiempo en que aún había magia en el mundo y honor en el corazón de los hombres.
El mundo fue nuestro, pero lo perdimos. Probablemente no hay nada más estimulante para las almas de los hombres que la victoria.