Descripción
Vaclav Smil lleva cincuenta años estudiando las posibilidades que tenemos a nuestro alcance para garantizar el futuro energético de nuestro planeta. Debido a la complejidad de las interacciones que mueven el mundo, la atomización del conocimiento y la volatilidad de la información es muy difícil anticipar con exactitud qué ocurrirá. Por eso es necesario ceñirse a los datos y a los límites que nos ofrece la ciencia, así como poner la atención en los escenarios más cercanos y menos idealistas para encarar los retos actuales de manera eficaz.